Estas astas desprendidas de forma natural le brindarán a su perro horas de diversión masticable, ¡además de dientes y encías más sanos! Son de primera calidad y no se astillan ni pelan como un hueso cocido convencional. Además, el tierno tuétano es una fuente natural de calcio, glucosamina, hierro y potasio, nutrientes clave que su perro necesita para una vida larga y saludable. Las astas de alce naturales están disponibles en rodajas y enteras.
Rico en nutrientes
Las astas naturales de alce no son solo un juguete para masticar; están repletas de nutrientes esenciales. Los perros se benefician de los minerales y vitaminas presentes en las astas de alce, como el calcio y el fósforo. Estos nutrientes ayudan a fortalecer los huesos y los dientes, asegurando que su perro se mantenga sano y activo. Además, al ser naturales, ofrecen una alternativa más segura a las golosinas procesadas químicamente, que pueden ser menos saludables para su mascota. Por lo tanto, incorporar astas naturales de alce a la dieta de su perro puede ser beneficioso para su salud general.
Larga duración y resistencia
Una de las principales ventajas de las astas naturales de alce es su durabilidad. A diferencia de muchas golosinas comerciales para perros, las astas de alce son duraderas y resisten horas de masticación. Esto significa que su perro puede disfrutar de una masticación satisfactoria sin destruir la golosina rápidamente. Gracias a su dureza y resistencia, las astas de alce también promueven la salud dental, ayudando a eliminar la placa y el sarro mientras su perro mastica. Por lo tanto, si busca una golosina que mantenga a su perro entretenido y a la vez favorezca su higiene dental, las astas naturales de alce son una excelente opción.
Un masticable versátil para todos los perros
Sin importar el tamaño o la raza, las astas naturales de alce son ideales para diversos compañeros caninos. Su variedad de tamaños las hace accesibles tanto para perros pequeños como grandes. Los chihuahuas pueden disfrutar de un bocado más pequeño, mientras que las razas más grandes pueden roer astas más grandes, lo que garantiza que todos los perros puedan disfrutar de los beneficios de este premio. Además, las astas de alce tienen una textura y un sabor únicos, lo que las hace deliciosas incluso para los comensales más exigentes. Por lo tanto, incorporar astas de alce como un alimento básico en la dieta de tu perro puede fomentar hábitos de masticación saludables.